Un toledano con solera y corazón poligonero
Roberto, el alma y motor de la cafetería-restaurante Alberto’s, es de esos vecinos que uno considera “de toda la vida”. Nació en el barrio de San Andrés, en pleno casco histórico de Toledo, y fue bautizado en su preciosa parroquia, un lugar lleno de historia. Como él mismo dice, es un Toledano de Toda la Vida (TTV).
En 1991 se mudó al barrio del Polígono, y desde entonces ha echado raíces profundas. Tantas, que ya casi se gana con honores el título de Poligonero de Toda la Vida (PTV). Y si le preguntas qué es lo que más le gusta del barrio, no duda: “la tranquilidad... y mis clientes”.

Un bar con alma y mucho más que café
En el Alberto’s, Roberto no solo sirve desayunos y raciones: sirve momentos. Lleva toda la vida en la hostelería, un oficio que, más que un trabajo, es su vocación. Rodeado de una clientela fiel y habitual, convierte cada visita en una conversación, una broma o un chascarrillo que le saca una sonrisa hasta al más despistado. Aquí, la barra es una extensión del salón de casa, y Roberto, ese camarero que te llama por tu nombre y sabe lo que vas a pedir antes de que lo digas. Eso, en estos tiempos, es oro.

De churros a carcamusas, ¡a cualquier hora!
El Alberto’s es de los madrugadores: abre sus puertas a las 07:00 y no cierra hasta las 22:00, de lunes a sábado. Los domingos se toma un merecido descanso. Por las tardes, Viki, que lleva ya ocho años echando una mano, le permite a Roberto tomarse un respiro.
Y aunque el descanso le venga bien, no es fácil despegarse de ese ambiente acogedor que ha creado. Los desayunos de la casa son de los que hacen historia: churros recién hechos, bollería, tostadas con mermelada o jamón... todo lo que hace falta para empezar el día con alegría.
Y si pasas más tarde, prepárate para disfrutar de una cocina casera que es puro homenaje a la gastronomía española: carcamusas, patatas bravas, huevos rotos con jamón… Todo preparado con mimo y ese toque que solo los años de experiencia y el cariño por el oficio pueden dar.

Un lugar para volver… y aparcar sin problema
El Alberto’s está en una zona tranquila del Polígono, con sitio de sobra para aparcar (¡que no es poca cosa!). Su orientación sur hace que la terraza sea apetecible todo el año: en invierno te acaricia el sol, en primavera y otoño se está de lujo, con temperaturas suaves y la luz perfecta para relajarte un buen rato y en verano las sombrillas te protegen mientras disfrutas de una caña, una tapa o una buena charla con amigos.
Además, al estar en una zona alta, el calor no se acumula, y por la noche es un auténtico lujo quedarse a disfrutar del fresquito, de la conversación y de unas raciones que no defraudan.

El bar donde todos saben tu nombre... y tu desayuno
Roberto es uno de esos profesionales que quedan pocos. Hace de su trabajo un arte, con atención al detalle, cercanía y un humor que nunca falta. No es raro que alguien entre con cara de lunes y salga como si fuera viernes. Y es que en Alberto’s no solo se come bien, se está mejor.

Así que ya sabes: si quieres un desayuno de los de antes, una comida con sabor de casa o simplemente desconectar con una tapa y buena compañía, Alberto’s es tu sitio.