En una tarde que parecía decisiva para el futuro del CF Benquerencia, el equipo respondió con una actuación brillante, dejando atrás una racha de tres partidos consecutivos sin ganar y catorce goles encajados. El duelo contra el CD Corazón Titán, que tampoco llegaba en su mejor momento, representaba una oportunidad para reivindicarse, y el Benque no decepcionó. El marcador final de 5-0 no solo consolida su potencial, sino que reafirma su capacidad para seguir soñando con el ansiado ascenso.
El técnico Maikel apostó por una estrategia arriesgada pero efectiva: dio minutos a jugadores menos habituales, buscando sacudir al equipo y generar una nueva dinámica. Esta decisión, sumada al regreso de Johan, una figura emblemática del club, y a la incorporación de Rauf, un fichaje que ya genera altas expectativas, resultó ser un golpe maestro. En el campo, el equilibrio entre experiencia y frescura se tradujo en un fútbol sólido y contundente.
Desde los primeros minutos, el Benque mostró una actitud distinta: presión alta, combinaciones precisas y una determinación que parecía perdida en encuentros anteriores. El Titán, aunque combativo, no tuvo argumentos para frenar la ofensiva local. Los goles llegaron como una catarata: tres en la primera mitad y dos más en la segunda, con actuaciones destacadas de Johan, quien marcó en su debut, y Mellado, que lideró el equipo con una inteligencia táctica que desbordó a la defensa rival.
Más allá del marcador, este partido significa un punto de inflexión para el Benquerencia. Atravesar una crisis de resultados es algo común en una temporada larga, pero la forma en que el equipo se rehízo deja lecciones importantes. La unión del vestuario y el acierto del cuerpo técnico en este momento crítico parecen haber sido clave para recuperar la senda de la victoria.
Con la temporada aún en su ecuador, el Benque ha demostrado que tiene calidad y carácter para pelear por el ascenso. Sin embargo, el desafío será mantener la constancia y evitar caer nuevamente en la complacencia. Si algo queda claro tras el 5-0 es que este equipo, cuando trabaja como bloque, tiene el potencial de alcanzar sus metas. El sueño sigue vivo, y esta victoria podría ser el impulso que necesitaban para mantenerse en la lucha.
